La reducción en el número de explotaciones agrarias es un hecho palpable en todas los países de la UE. En Alemania, de las casi 300.000 explotaciones agrarias que había en 2010 solo 275.000 seguían activas en 2016, según los datos de la Oficina Federal de Estadística de Alemania (Destatis), lo que supone una reducción de un 8%.
No obstante, choca la elevada reducción registrada en el sector porcino, más aún cuando es un sector que lleva unos años con precios razonables. El número de explotaciones porcinas disminuyó en un 35% de 2010 a 2019. Mientras que en 2010 había 33.400 granjas, en 2019 solo quedaban 21.600. El censo porcino también ha disminuido, pero en mucha menor proporción, solo en un 2%, lo que pone de manifiesto que la producción se está concentrando.
Los ganaderos más pequeños son los que más frecuentemente han optado por cerrar sus explotaciones. Las mayores restricciones, que cada vez se aplican al sector, han generado unos costes adicionales que las pequeñas granjas tienen dificultad en asumir. Las explotaciones especialmente pequeñas (menos de 100 cerdos) se vieron particularmente afectadas por el cierre. De las 4.200 que había en 2010, solo quedaban 1.700 en 2019, lo que supone una reducción de un 60%. El número de explotaciones con 500 y 999 animales disminuyó en un 32% en el mismo período y el de explotaciones con 1.000 a 1.999 cerdos, en un 8%.
Por el contrario, el número de explotaciones con más de 5.000 cerdos aumentó, pasando de 300 a 500, lo que supone un crecimiento de un 67%. También creció el segmento de explotaciones entre 1.000 y 2.000 cerdos (+35%).
Fuente: agrodigital.com
Palabras claves:
Alemania
,
censo
,
cierre