Se trata de un interesante caso de agregado de valor en origen en el que, impulsados por la entidad ruralista, los productores primero armaron la cooperativa (que lleva el nombre de un histórico
líder federado regional) para mejorar sus condiciones de venta de porcinos y luego empezaron a trabajr con la Asociación de Carniceros para organizar la comercialización de chacinados que
lleven el sello de la Federación.
Y desde pasado 8 de septiembre, cuentan con un frigorífico de segunda generación que tiene tres salas de secadero con una capacidad de 500 kg por rotación de sala. Las salas de secadero
aportan las condiciones adecuadas de temperatura y humedad para la fabricación de embutidos de cerdo como bondiolas, salame, jamón y lomo. En total, el frigorífico se encuentra en
condiciones para producir 1000 Kgs diarios, con miras a ampliar esta capacidad en el futuro.
"La idea es seguir sumando productos, y luego tener algún producto especializado a medida que el desarrollo lo permita", contó a Punto Biz Omar Príncipe, Secretario Gremial de la Federacion.
El emprendimiento permite que los pequeños y medianos productores de carne de cerdo obtengan una salida para su producción, ya que serán los chacareros federados quienes provean la
materia prima del frigorífico, comprada por la Cooperativa. La experiencia surgió de un fondo rotatorio que se gestiona en el Ministerio de Agricultura de la Nación, con el objetivo de que los
pequeños productores puedan invertir. Para poner el frigorífico en condiciones de funcionar se invirtieron $3M.
A su vez, se plantea que los consumidores puedan aliviar sus bolsillos ante un producto alternativo más económico que llegue a las góndolas y carnicerías. "A medida que se vaya acentuando la
cadena de producción, comercialización e industrialización, se puede ir expandiendo la cadena", opinó Príncipe.
Los productos están siendo distribuidos en el sur y el centro de la provincia de Santa Fe. La intención es llegar más lejos y llevarlos también afuera de la provincia, pero aun se está tramitando el
tránsito federal necesario para tal fin.
Las instalaciones existían previamente. Fueron adquiridas por la Cooperativa y se le hicieron una serie de intervenciones para que hoy puedan funcionar. La comerciacización de un producto
propio de la Cooperativa, que lleve el sello de la Federación Agraria, permite darle un valor agregado a los productos, ya que apuesta a la generación de empleo y tiene una impronta solidaria con
los productores regionales.
Fuente: Punto Biz (www.puntobiz.com.ar)
